Este libro explica en gran detalle y claridad excepcional los asuntos relacionados con el rapto de la Iglesia, el gobierno del Anticristo, la "gran tribulacin", y todos los juicios apocalpticos que Dios derramara sobre el mundo, en los ltimos das. Creemos que el rapto de la Iglesia causara el colapso de las instituciones econmicas, polticas y religiosas a travs de todo el mundo. En ese momento, la humanidad buscara un lder capaz de salvar el mundo, y de ofrecerles paz y seguridad a las gentes. De manera que por aclamacin popular, el mundo le dar la bienvenida a un falso principe que la Biblia llama el Anticristo. Este hombre inspirara las masas, dicindoles lo que ellos quieren or. El Anticristo empujara la humanidad a los niveles ms bajos de degradacin, vicios, inmoralidad, crimen y rebelin abierta contra Dios. El corromper el orden social y moral y como resultado, billones de personas morirn. El hundir la humanidad en oscuridad espiritual y la guiara derecho la perdicin. No nos podemos ni siquiera imaginar el horror y el sufrimiento sin fin que la humanidad experimentara a travs del caos que el Anticristo creara en la Tierra. La Biblia dice que el imperio del Anticristo "devorara, trillara y despedazara" toda la Tierra (Daniel 7:23b VRV). Con respecto a este periodo de sufrimiento humano, el Seor Jess dijo: "Porque aquellos das sern de tribulacin cual nunca ha habido desde el principio de la creacin que Dios creo, hasta este tiempo, ni la habr" (Marcos 13:19 VRV). La "gran tribulacin" ser un periodo caracterizado por guerra, hambre y desastres naturales a gran escala, esparcidos por toda la Tierra. La Biblia dice que 25 y 33 por ciento de la poblacin mundial morir durante ese periodo como resultado de dos eventos globales. Si esos eventos ocurrieran en nuestro tiempo, 3.56 billones de la poblacin del mundo, morira.

Este libro explica en gran detalle y claridad excepcional los asuntos relacionados con el rapto de la Iglesia, el gobierno del Anticristo, la "gran tribulación", y todos los juicios apocalípticos que Dios derramara sobre el mundo, en los últimos días. Creemos que el rapto de la Iglesia causara el colapso de las instituciones económicas, políticas y religiosas a través de todo el mundo. En ese momento, la humanidad buscara un líder capaz de salvar el mundo, y de ofrecerles paz y seguridad a las gentes. De manera que por aclamación popular, el mundo le dará la bienvenida a un falso principe que la Biblia llama el Anticristo. Este hombre inspirara las masas, diciéndoles lo que ellos quieren oír. El Anticristo empujara la humanidad a los niveles más bajos de degradación, vicios, inmoralidad, crimen y rebelión abierta contra Dios. El corromperá el orden social y moral y como resultado, billones de personas morirán. El hundirá la humanidad en oscuridad espiritual y la guiara derecho la perdición. No nos podemos ni siquiera imaginar el horror y el sufrimiento sin fin que la humanidad experimentara a través del caos que el Anticristo creara en la Tierra. La Biblia dice que el imperio del Anticristo "devorara, trillara y despedazara" toda la Tierra (Daniel 7:23b VRV). Con respecto a este periodo de sufrimiento humano, el Señor Jesús dijo: "Porque aquellos días serán de tribulación cual nunca ha habido desde el principio de la creación que Dios creo, hasta este tiempo, ni la habrá" (Marcos 13:19 VRV). La "gran tribulación" será un periodo caracterizado por guerra, hambre y desastres naturales a gran escala, esparcidos por toda la Tierra. La Biblia dice que 25 y 33 por ciento de la población mundial morirá durante ese periodo como resultado de dos eventos globales. Si esos eventos ocurrieran en nuestro tiempo, 3.56 billones de la población del mundo, moriría.

¿En qué se basan los estudiosos del tema del fin del mundo para advertirnos y apurarnos a que tomemos precauciones? Los creyentes reconocemos que es posible el fin del mundo como lo conocemos porque las señales que la Biblia y los Mensajes Marianos dicen que lo anunciarán... ya las estamos viviendo. Otras culturas antiguas y videntes de todas las épocas también predijeron lo mismo y, sorprendentemente, se han venido realizando sus predicciones. Pero si Ud. es de los que no creen en nada de lo anterior, permítame decirle que, en la realidad actual, con estudios científicos y pruebas de ellos, se ha señalado que existen varias amenazas potenciales para la humanidad y que, de concretarse, efectivamente ACABARÍAN CON EL MUNDO COMO LO CONOCEMOS.

Dispensationalism continues to provoke heated debate within the Christian world. Highly acclaimed theologian, Dr. Charles C. Ryrie, addresses this crucial issue from the perspective of classic dispensationalism. He confronts the views of covenant theology, historical premillennialism, ultradispensationalism, and, in this revised edition, the increasingly popular progressive dispensationalism. In his best-selling book, Dispensationalism Today, written more than thirty years ago, Dr. Ryrie made this complex subject more understandable for thousands worldwide. This revised and expanded version of that book will prove to be an invaluable reference tool for your library.

Hippolytus of Rome (170–235) was the most important 3rd-century theologian in the Christian Church in Rome, where he was probably born. Photios I of Constantinople describes him in his Bibliotheca (cod. 121) as a disciple of Irenaeus, who was said to be a disciple of Polycarp, and from the context of this passage it is supposed that he suggested that Hippolytus himself so styled himself. However, this assertion is doubtful. He came into conflict with the popes of his time and seems to have headed a schismatic group as a rival Bishop of Rome. For that reason he is sometimes considered the first antipope. He opposed the Roman bishops who softened the penitential system to accommodate the large number of new pagan converts. However, he was very probably reconciled to the Church when he died as a martyr. Starting in the 4th century, various legends arose about him, identifying him as a priest of the Novatianist schism or as a soldier converted by Saint Lawrence. He has also been confused with another martyr of the same name. Ironically, it is Pius IV who identifies him as "Saint Hippolytus, Bishop of Pontus" who was martyred in the reign of Alexander Severus through his inscription on a statue found at the Church of St. Lawrence in Rome and kept at the Vatican as photographed and published in Brunsen.